Sunday, October 30

Bolero

Qué vanidad imaginar
que puedo darte todo, el amor y la dicha,
itinerarios, música, juguetes.
Es cierto que es así:
todo lo mío te lo doy, es cierto,
pero todo lo mío no te basta
como a mí no me basta que me des
todo lo tuyo.


Por eso no seremos nunca
la pareja perfecta, la tarjeta postal,
si no somos capaces de aceptar
que sólo en la aritmética
el dos nace del uno más el uno.


Por ahí un papelito
que solamente dice:


Siempre fuiste mi espejo,
quiero decir que para verme tenía que mirarte.


Y este fragmento:


La lenta máquina del desamor
los engranajes del reflujo
los cuerpos que abandonan las almohadas
las sábanas los besos


y de pie ante el espejo interrogándose
cada uno a sí mismo
ya no mirándose entre ellos
ya no desnudos para el otro
ya no te amo,
mi amor.




- J. C

Friday, October 28

los cuerpos.

Mi cuerpo suave rodeando tu cuerpo indigno, rodeándonos como gusanos, como anfibios que se superponen, rotando sobre las espaldas y alcanzando niveles inimaginables, doblando nuestros cuerpos en secciones; descubriendo, sollozando, sofocando. Las extremidades vuelan, de pronto ya no tenemos ojos y todo pasa muy rápido y tan lento a la vez, las sábanas rojas se tragan los cuerpos blandos, no importan los rostros ni los corazones, somos invencibles, inmortales, inmunes a los dolores terrenales. Nos estamos equivocando y es hermoso mirar los destellos de sol sobre los cabellos húmedos, los dedos que se deslizan sobre los hombros, recorriendo los brazos, volviendo al origen. No estamos en el cielo, tiernamente ardemos en las entrañas del infierno, maldiciendo las oportunidades y los hechos que han desencadenado en este terrible malentendido; yo no venía a esto, pero mi cuerpo se enredó en el tuyo y entonces me he alejado de los propios sentimientos volviéndome completamente vulnerable a los sentidos desnudos (...)

Wednesday, October 26

lo que queda.

me quedan tres cigarros en la cajetilla de veinte. hay cinco libros leídos y dos por leer en mi velador. cuatro cápsulas de melisa en la cajita de bob marley, dos paracetamol en mi bolso, seis tapitas de corona en el bolsillo de afuera. un canasto de ropa para doblar, la loza sucia es incontable, cuarenta minutos antes de salir, un plato y quizás medio de comida en la olla. ocho dígitos marcados en el celular. doce correos nuevos, siete en borrador. una carta por enviar, una encomienda por recibir y una postal en espera. alergia. un café aún caliente sobre el escritorio hecho un desastre. y ni ganas de contestar el teléfono. explosiones -pueden ser petardos- a unas dos cuadras de distancia, cada un minuto y en serie. corre viento afuera, hay sol; veinticinco grados según un termómetro en pudahuel. trece huevos en la bandeja, cuatro panes en la bolsa, cinco horas de insomnio, un sueño que podría calificar como pesadilla. no queda azúcar ni salsa de tomate. a la sofi le queda corto el jumper. tengo seis planas de apuntes para la prueba de historia, apuntados una vez y nunca releídos. tampoco me quedan hojas en la impresora. jalea real en un pote de tabaco. otra caída entre tantas muchas.

Tuesday, October 25

4 years behind.

Quisiera decir que te quiero, pero yo no soy de esas personas que mienten para que las cosas duelan menos, para que el pasado duela menos, para que las todo sea menos diferente a como era antes. Me dan ganas de querer quedarme contigo, de abrazarte y besarte con amor de verdad, de añorar como cabra chica las noches eternas que era imposible conseguir cuando realmente las quería. Me doy cuenta de lo difícil que es querer querer, y que ya no resulte más. Creo que todos los tropiezos ayer valieron la pena pera decir que hoy volver al inicio no es retroceder, sino avanzar.

Sunday, October 16

we f.

a veces no me entra el corazón en el pecho y me inflamo como un ruiseñor coqueto. me cuesta respirar y se me ponen los ojos rojos, sin marijuana. se duermen mis manos y entonces caigo sentada hacia atrás, respiro despacio cuidando que la sangre no fluya demasiado hacia mis mejillas y justo en ese momento, justo cuando dejas de mirarme y te volteas para encender un cigarrillo exhalo mi emoción en un tremendo suspiro. y vuelves para mirarme, y me pides fuego -porque el tuyo no funciona-. todo pasa tan rápido y cuando despierto toda la emoción está esparcida en el piso, y lo que fue un corazón tremendo dentro de un pecho inflamado es ahora un suspiro de desaliento antes de decir adiós y salir con los zapatos en la mano; para no hacer ruido. para no despertarte, mi amor.