Saturday, October 10

suck your blood, drink your wine.

Como que ya no escribo, como que ya no pienso. El tubo que vaciaba mi cabeza directo al botón que creaba las entradas de este blog se tapó y ahora va a dar de mi boca a la taza del baño, pasa por las cañerías, se va al mar y en el verano quizá me tope con el pedacito de carne que me comí ayer. Ya no hay historias que contar, y las que quiero contar se me olvidan. Ya no duermo y desde que conocí las drogas naturales (no me refiero a la mary jane, mal pensador) lo poco y nada que paso con los ojos cerrados me basta para subsistir la semana con los ojos abiertos pensando en lo que se me pierde cada vez que abro los brazos, lo que extraño cuando se me aclara la mente y lo que olvido cuando respiro aire santiaguino. Hoy hay lágrimas y hay distancia, me tiritan las manos y calmo todos los malestares con un seis gotitas de yerbitas mágicas remojadas en alcohol (95% de pureza). Descubrí, en estos días, que me gusta entrecerrar los ojos cuando están húmedos y ver bichitos imaginarios subiendo por las paredes. Descubrí que no hay nada más horrible en todo el mundo que los hombres-poco-hombres y las mujeres tontas. Descubrí que amigas de verdad se encuentran poquísimas en la vida y que yo tengo la suerte de tener varias. Hoy lo que más me gusta es mi cama que es como un nidito delicioso, mi perra que se da cuenta cuando tengo penita y me hace cariño y mis seis gotitas diarias de drogatranquilidad. Pero quiero fluorescencia, tu esencia, mi consuelo, el suelo, mis rodillas, el vómito, los pajaritos y las flores de ciruelo ya se pudrieron. Fluorescencia. Ultra violeta. Fosforece la conciencia. Rima la aspirina. No entiendo nada, y ya me derretí.-

No comments: