Algún día apareceré en tu casa en la madrugada y te tiraré piedritas a la ventana para despertarte y que salgas en pijama a darme mi beso de 'nos vemos luego' porque ya aprendí que contigo no existen las despedidas ni los 'para siempre' ni los 'hasta nunca'; al final, a pesar de todo estás aquí, conmigo. Por eso te amo. Sólo por eso, y después viene el resto.
(Pa que te hacís el weón si al final igual me psicopateas y me quieres y me extrañas, al final no quieres que me aleje pero estás seguro de que volveré y no estás dispuesto a ofrecer más. Yo me cansé de ceder.)
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