Sunday, September 27

time to pretend.

Me encantaría poder odiarte. Y cuando te odie me encantaría decírtelo. Cuando te odie me encantaría gritarte. Cuando te odie me encantaría poder decirte todas las cosas que hasta hoy no puedo decirte porque me da miedo que me odies antes de que yo te odie a ti. Lo mejor que me podría pasar ahora sería odiarte, pero en cambio, i cant stop loving you.

Podría caer en lo patético y correr hasta tu casa solo para decirte que no puedo vivir así. Para ver la realidad con mis ojos y ver si así tengo fuerza suficiente para alejarme de toda la mierda que irradias en mi vida, que no me deja ni vivir ni respirar. No puedo parar de girar, girando no me dan tantas ganas de vomitar. Pero vuelvo con las rodillas al suelo, y me golpeo tan fuerte que ya no sirve de nada querer abrir los ojos, no queda nada alrededor, ni las luces fluorescentes que marcaron el camino de vuelta a tu cama. Ni las sábanas que se tragaron nuestros cuerpos. Ni los celulares. Ni las escaleras. Ni los árboles. Ni las palabras. Ni septiembre. Ni las casi tres semanas. Ni lo ridículo. No sirvió de nada el trocito de corazón que dejé dentro de su bota, para que le doliera si se iba con otra. Todo desapareció. Se acabó para siempre. (Mem. dejar de decir "para siempre")

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